La noche
Oh, bosque, no me tragues,
no me encierres en ti,
es horrible ese abrazo de tus ramas,
es horrible esta noche indiferente,
tus aguas que me llaman,
tus feroces panteras en la noche...
Es horrible y no puedo
evitar abrazarte cada árbol,
apretarme tus hojas contra el pecho,
huir,
huir de mí y hallar tus flores,
tus leopardos callados y tu luna.
(Diana María Ivizate González, Ocultas fragancias que golpean)
No hay comentarios:
Publicar un comentario